El conocimiento y las tecnologías se han convertido en factores decisivos del desarrollo social. La conversión de la ciencia en fuerza productiva directa, proceso que ya previera Carlos Marx desde el siglo XIX, se ha potenciado con la tecnociencia actual. A esto hay que adicionar que el conocimiento, la ciencia y la tecnología ejercen gran incidencia de transformación cultural, generando nuevos símbolos, valores, actitudes y estilos de pensamiento que también transforman nuestras condiciones de vida.
En las condiciones de nuestro país y en la implementación de nuestro Modelo de Desarrollo Social Socialista, estos procesos tienen plena vigencia. Desde los inicios mismos del proceso revolucionario, Cuba ha incorporado al conocimiento, la ciencia y la tecnología como pilares de la construcción de su sociedad socialista realizando un importante esfuerzo de universalización del conocimiento que permita su más amplia apropiación social de modo que el conocimiento pueda convertirse en hecho cultural y desarrollar una función social transformadora de los seres humanos.
Todo el sistema universitario, visto en el conjunto sedes centrales- sedes universitarias municipales contribuye decisivamente a estos propósitos y abre un nuevo capítulo en las posibilidades reales de contar con instituciones dinamizadoras de la gestión del conocimiento en el nivel territorial. Pero es necesario enfatizar que el conocimiento no actúa en un vacío social, lo hace dentro de formaciones sociales, con sus propias estructuras económicas, políticas y culturales; así como sus correspondientes actores (clases, grupos, sectores) sociales. Son esas formaciones, estructuras y actores los que determinan la producción y uso del conocimiento, en particular el conocimiento científico y tecnológico.
- Profesor: Christian Miguel Cardenas Cuellar